Muchas veces como niña, mirando por la ventana,
desbordó en la madrugada, una lágrima en mi piel.
Llanto que aun lo recuerda, mi mente con altibajos,
porque no tuvo tus brazos, para fuerte sostener.
Las horas así pasaban, he soñado tus promesas, que
se volvían pereza, tu dejabas de cumplir. Sin embargo
aun te nombro porque pienso, no es tu culpa,
quizás el destino oculta, todo amor que aún me das.
De ti ,yo no pido nada, y si lo quiero que importa ,
el amor siempre se entrega sin pedir, ni reclamar.
Por lo tanto, no interesa, yo no pienso en el olvido,
porque mi amor no es castigo, ni tampoco bendición.
Pero igual te digo hoy, que si amar es sufrimiento,
No interesan las palabras , que hieren al corazón.
Si es el mismo que te lleva, conmigo así lo que siento,
tal vez tú no lo comprendas, no importa comprendo yo.
Me deprimo por momentos, pero siempre hay un motivo,
luego pienso todo pasa y olvido ese dolor. No vale perder
la vida, buscando que sufrimientos, en un solo momento
destruyan tu ilusión. Olvidé ese dolor, ahora es un recuerdo.
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